Eterna Navidad
En mi familia la Navidad siempre fue algo grande.
Mis papás se las ingeniaron para que mi hermano y yo creciéramos con una fuerte presencia familiar siguiendo tradiciones tanto culturales como religiosas, sin reprimir nuestra propia personalidad, lo cual agradezco infinitamente.
Entre las tradiciones más arraigadas de mi familia, está la Navidad. Y en mis memorias el Soundtrack oficial es un album de finales de la década de los 80s, que incluía villancicos cantados por los artistas mexicanos más populares de ese tiempo. El álbum se titulaba, “Eterna Navidad”.
Eran tanta la emoción por los festejos, que mi hermano y yo empezabamos a escuchar el album incluso con semanas de anticipación.
Las Posadas
Al tener una familia extensiva numerosa, pudimos tener auténticas posadas Navideñas con gran afluencia cada año. Se establecía un rol entre las tías y tíos de la familia, y así cada día entre el 16 al 24 de Diciembre, se armaba la posada en una casa diferente.
Mis abuelitos llevaban las figuras de los Santos Peregrinos, hojas impresas con los cantos, y algunos instrumentos musicales para que nosotros los nietos usaramos.
Se rezaba el rosario, y entre cada “misterio” cantabamos un villancico. Al final del rosario mi abuelita llamaba a dos de los nietos de la respectiva casa, quienes debían sostener la figura de la Virgen María, y la figura de San José, y se procedía la representación del peregrinaje. Algunos de los presentes se iban a un cuarto aparte y cerraban la puerta para cantar la parte de los “caseros”, los que permanecíamos afuera cantabamos la parte de los Peregrinos.
Una vez que los peregrinos eran "recibidos", cantabamos uno o dos villancicos, para luego pasar a la piñata.
Después seguía la cena. Mientras los adultos platicaban, los primos nos juntabamos a jugar escondidas, “Paz” o cualquier juego que se nos ocurriera. Reíamos, platicabamos tonterías, intercambiabamos ideas de qué pedirle al Niiño Dios, nos recontabamos las aventuras del verano, e intentábamos imaginarnos que encontraríamos bajo el árbol la mañana del 25 de Diciembre.
Los anfitriones repartían los famosos bolos, unas bolsitas con cacahuates, una naranja, dulces, o como mi abuelita le llamaba “la colación”. Que casi siempre iba acompañado de la advertencia que solo los que cantaron y rezaron recibirían tal botín.
Las posadas eran una dicha inmensa...Ver a todos los primos, jugar, romper la piñata, comer dulces, y ¡repetirlo todo por 8 días consecutivos! ¿Qué más podíamos pedir?
Otras tradiciones
Cada Navidad mis abuelitos ponían un lindo Nacimiento, con muchas figuritas, vegetación, animalitos, casas, hasta un pequeño lago. Recuerdo la emoción de ver a mi abuelito planear como se vería, y cuando nos dejaba “ayudarlo” que la verdad era más el tiempo que le costaba después corregir lo que hacíamos a medias, pero aún así él también se veía muy contento de que estuvieramos allí.
Pase horas admirando sus nacimientos, y cuando ibamos a misa los domingos, también nos acercabamos a ver los que ponían en las iglesias de mi ciudad.
En un año, mi papá y algunos tíos organizaron una pastorela, en la que participamos casi todos los primos. Estuvo muy divertido el proceso, que incluyo hacer parte de la escenografía, y múliples horas de ensayos para aprendernos los diálogos. Y el excelente resultado... ¡memorias que no tienen precio!
En otro año, mi hermano, mi papá y yo construímos una piñata en forma del Transbordador Challenger. Fue sumamente entretenido, y la piñata tenía tanto engrudo que toda la familia alcanzó a pegarle antes de que por fin se rompiera y liberara los dulces. Cabe aclararse que afortunadamente mis papás nunca compartieron conmigo la noticia de lo occurrido al verdadero #Challenger en Enero de 1986, y su valiente tripulación.
Unos zapatos muy grandes que llenar
Esos 15 días entre la primera posada y la celebración de la víspera de Año Nuevo, de cada año de mi infancia, fueron los mejores regalos que mi familia podría haberme dado.
Aunque con tristeza acepto que la temporada nunca se volverá a sentir tan bien como entonces, intento encontrar la belleza en las Navidades de la vida adulta. Incluso de alguna forma muy burda intento recrear esa magia y magnetismo que a mi familia se le da de una manera tan natural.
Ahora, como migrante, lejos de mi país, y más importante, de mi familia y amigos; las memorias mencionadas anteriormente me acompañan, e incluso me abrigan emocionalmente.
Toda esa dedicación de mis papás y abuelos que me trajó tanta alegría y fascinación, es una demostración de amor puro. Aún cuando ese capítulo de mi vida ha quedado atrás, en mi mente y mi corazón siempre quedarán esas Navidades no como simple referencia, si no como definición absoluta de la Natividad.
Y es así, que permanece como mi Eterna Navidad...Feliz, vibrante, reconfortante, tan llena de paz y amor.
De todo corazón deseo para las generaciones venideras que tengan la gran fortuna de experimentar su encanto, y que cómo yo, lo lleven consigo incluso en días más solitarios.
Felicidades!! Muy lindo todo , gracias!!!🥰🤗❤️👏
Gracias!!
Muchas gracias!! Que bonito !!!😇🥰
Felicidades!!!!🥳
I was in tears even before playing the video! Recently started watching Bluey and to be honest I am saviouring every episode, making sure not to rush through them. Luce as a kid would have love it too! Without all the sometimes extreme drama cartoons such as "Candy", "Peline" and the anime series called in Spanish "La Ranita Demetan" displayed. I also remember feeling sad and stressed after watching some of them...But Bluey is so not like that. I am sure this is appreciated by kids and parents equally. Cheers to all healthy, innocent and non invasive copying mechanisms! And thanks for sharing this one! 😍